Mirando, pero de otra forma

Han vuelto a pasar esos pequeños días en los que las miles de maneras de sonreír y locuras que hacer ocupan todo el tiempo. Empezamos pisando fuerte y sin parar. Estamos creciendo; plantándole cara a esos problemas que intentan distanciar, disfrutando de esos pequeños sorbos de bebida y siendo feliz entre algún que otro grito de felicidad. Los recuerdos empiezan a permanecer. Esto comienza a subir.
Eso de tener personas que te enseñen a soñar, otras que te hagan grande y otras que compartan tus locuras es de lo mejor que tengo. Da igual una tarde acuática, una en algún rincón fresquito apartado o otra perdida entre palabras y besos que todas y cada una de ellas hacen que el mundo comience a girar al ritmo de nuestros pasos. Nunca lo hubiera imaginado pero de verdad los sueños algún día se hacen realidad.
 La sensación de que hay alguién a quien sin avisarle aparece en el momento justo y preciso. A esos momentos en el que no sabes como salir y de repente como por arte de mágia aparece la solución. No hablo de una vida de princesas , besos perfectos e inexistencia de los problemas. Pero sí que hablo de  "te quiero" bonitos y verdaderos, besos necesarios, sonrisas que parecen grabadas en la piel , de sueños hechos realidad y de guerras entre personajes de Toy Story . Habrá en alguna que otra piedra por mi camino hacia el cielo, pero no me importa porque mi felicidad nadie lo tendrá fácil para arruinarla y mientras tanto siempre tendré a alguién para impedirlo.